Para gustos los colores. Por supuesto que a todos nos gusta probar el coche que nos vamos a comprar, y para eso existen otras alternativas al modelo tradicional.
Pero yo, entre un comercial que lo único que quiere es venderme la moto (la mayoría de las veces estropeada), a estar en el sillón de mi casa, sentadito, pudiendo comparar precios de concesionarios de toda España, donde yo elijo las características del coche que me quiero comprar y que necesito, en vez de que me intenten meter por los ojos algo que no quiero y que le compensa vender al comercial, que me permite comparar en minutos un montón de precios y quedarme con el mejor sin tener que gastar mi tiempo y mi dinero para obtener una comparativa medio decente y que me rompan la cabeza los comerciales... pues que quieres que te diga.
Los concesionarios físicos no se van a acabar, entre otras cosas porque el coche te lo van a tener que entregar en algún lado, lo tienes que probar, y tienes que seguir haciéndole mantenimientos. Pero sí que va a cambiar el modelo.
Hoy en día ninguna persona con un cierto nivel de usuario de las nuevas tecnologías se le ocurre comprar un coche de segunda mano sin buscarlo en webs especializadas tipo coches.net, autoscout y similares. Esto acabará llegando también, y para quedarse, en la venta de coches nuevos. De hecho en alguna de esas webs ya se puede pedir presupuesto de coches nuevos, aunque todavía es algo muy residual. Y al que no le guste, lo que dije, se lo tendrá que tomar de dos veces, porque es la tendencia imparable que se acabará imponiendo. A medida que las personas que no se llevan bien con las nuevas tecnologías acaben desapareciendo del panorama, este modelo se acabará imponiendo, porque lo exigirán los usuarios, y los concesionarios que no se adapten a ello morirán. No hace falta ser Nostradamus para ver esto.
Saludos.