No hace falta que te fies de ningún taller, simplemente ver lo que cuentan y si tiene lógica. Y cuando todos cuentan lo mismo y de la misma compañía... cuando el río suena agua lleva.
Es de cajón, las aseguradoras van a gastarse lo menos posible, eso es un hecho. Por tanto aprietan al taller para que les cobre lo menos posible. Si el taller cobra poco, para tener algo de margen, tendrá que invertir poco, y si tiene que invertir poco, eso al final termina derivando en que la reparación se hace lo más barata posible, y por tanto, mal realizada. Por algún sitio tiene que cuadrar la cuenta.
Si a eso le sumas los acuerdos entre compañías, por las cuales siempre paga tu compañía seas o no el culpable, ya tienes el caldo de cultivo para que la reparación sea de todo menos bien hecha.
Claro, si tú eres de Mapfre, lo más que has tenido ha sido un rozón, lo llevas a sus talleres concertados, y no pones más pegas, pues todos tan felices, Mapfre porque se gasta lo menos posible, el taller porque tiene trabajo, y el cliente porque le han pintando el rozón. Pero cuando dentro de 3 años se empiece a perder el color o desconchar porque han aplicado solo pintura sin laca o productos de mala calidad... ve tú a reclamar después.